San Pablo nos propone a los que hemos sido bautizados en Cristo Jesús, un programa muy dinámico y exigente: "Ya que habéis resucitado con Cristo, buscad los bienes de allá arriba... aspirad a los bienes de arriba, no a los de la tierra"
Vivir según la Pascua significa vivir en alegría, sin perezas, sin cobardías ni medias tintas.
San Pedro nos dice: "Nosotros somos testigos... nos encargó predicar, dando solemne testimonio, su resurrección"
Todos debemos ser misioneros y mensajeros, no tanto con discursos sino con nuestro estilo de vida, con la convicción de que la salvación está en Cristo Jesús, que El es quien da sentido a nuestra existencia, que vale la pena seguir su camino porque ahí está la verdadera felicidad. Cada uno en su ambiente: en la familia, en la sociedad, en el trabajo, en el barrio, en la comunidad cristiana...
No hay comentarios:
Publicar un comentario